No se trata de hacerse preguntas. Ni siquiera, de hacerse preguntas importantes. Se trata de hacerse preguntas clave, transformadoras, creadoras de pensamiento y disrupción, que lleven a la acción, que te dirijan al cambio y a la mejora. Sin duda, este fue uno de los aprendizajes que pudimos extraer de la última sesión del Club de Desarrollo Personal y Liderazgo que organizamos.
Acudió Ezequiel Terol, director ejecutivo de John Maxwell Team, para poner en marcha una sesión de su Leadership Game. Nuestros socios, acostumbrados a todo tipo de dinámicas de trabajo, observaban con curiosidad los elementos dispuestos sobre la mesa. Pulseras de colores, tarjetas, post it, un par de dados y rotuladores.
No sabíamos que estábamos ante una sesión en la que la apertura, las ganas y la energía transformadora de las preguntas iban a ser las protagonistas.
Este juego (nos encanta todo lo relacionado con gamificación, ¿viste nuestro Innova&Acción del pasado mes de enero?) surge de la necesidad de crear un entorno de mejor liderazgo, más productivo y eficiente. Y consiguió que todos los asistentes se plantearan muchos aspectos de su liderazgo y su forma de trabajar con sus equipos hasta el punto de llevarse listas de tareas pendientes o posibles iniciativas transformadoras.
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No queremos desvelar el secreto de este juego, puesto que es algo que os animamos a descubrir en vuestros equipos. Pero sí nos encantaría que reflexionarais sobre algunas de las cuestiones que se plantearon durante la tarde y que hicierais el ejercicio de contestarlas de forma sincera y sobre todo, con ganas de mejora.
- ¿Con qué frecuencia compartís lo que habéis aprendido? ¿os comportáis como un río o como un depósito de conocimiento?
- ¿A qué tema dedicáis al menos una hora diaria y consideráis que os estáis convirtiendo en expertos? ¿Querríais ser expertos en otras cosas?
- ¿A qué parte de mi empresa/público no estoy escuchando?
- ¿Qué has leído hoy y qué cosa has intentado y no has conseguido?
- ¿Qué pasos o medidas toma tu empresa para formar y retener a los líderes?
- ¿Qué decisión complicada has tenido que tomar los últimos doce meses que ha transformado tu empresa?
Muchas de esas preguntas tenían que trabajarlas cada uno de los asistentes y después, compartirlas con la persona que tenían a su lado. Más tarde, tratábamos las respuestas en grupo, leyéndolas en voz alta y los participantes podían premiar las que más les gustaran con tarjetas con puntos.
Lo interesante de la jornada fue que pudimos reflexionar sobre nuestro tipo de liderazgo, pero también sobre nuestra organización, nuestro equipo, nuestros clientes o nuestra metodología. Una forma global de ver el día a día, de cuestionarlo, de sacarle partido.
Fue una tarde muy productiva, en la que los asistentes compartieron su punto de vista, hablaron sobre los conflictos, problemas y retos a los que se enfrentan como líderes y reflexionaron sobre ellos de forma abierta y sin juicios. Sin duda, salimos de la sala con una mentalidad de líderes más abierta, eficaz, empática y mejorada. Todo gracias a hacernos preguntas clave.
