La afirmación que titula este artículo es con la que Ricardo Estellés (analista financiero en analista financiero en Apollo GM – Avantcard) iniciaba el Programa de Herramientas Financieras que la Asociación ha impartido los días 22 y 23 de noviembre, y con la que nos invita a reflexionar sobre la importancia de las finanzas y los resultados económicos de las empresas desde un punto de vista más operativo y menos “contable”.
Si echamos un vistazo a noticias económicas recientes como es el caso “Pescanova”, se pone de manifiesto que la cuenta de resultados no siempre es un reflejo fiel de la situación económica real de las empresas. Ya sea de una manera intencionada o no, los datos “oficiales” en los balances y cuentas de resultados pueden no ser el mejor indicador para tomar decisiones, haciéndose patente la necesidad de contar con indicadores “operativos”, más ajustados a la realidad y que permitan tomar decisiones más acertadas en el corto plazo. Asimismo, disponer de indicadores más precisos, facilita a las empresas actuar sobre las desviaciones a tiempo y con foco en el origen de las mismas, pudiendo corregir estrategias de negocio o establecer otras nuevas. De esta manera, el análisis de los indicadores y datos financieros más operativos permite anticipar como afectarán al resultado final determinadas medidas como pudieran ser una reducción de costes o una inversión en equipos, y puede poner de manifiesto que un incremento en las ventas puede no ir asociado a un aumento del beneficio.
Es imprescindible tener conocimiento de los conceptos financieros
En el Programa también se puso de manifiesto que los profesionales, prácticamente de cualquier área y sector, no deberíamos dejar de lado que vivimos en un mundo económico y dominado por la información financiera, en el que se hace ya imprescindible adquirir un conocimiento general de los conceptos financieros. Este conocimiento no debe ser exclusivo de los altos directivos de la empresa y nos permitirá, entre otras cosas, entender la posición y argumentos del área financiera y tenerlos en cuenta en nuestras intervenciones y planteamientos en reuniones de trabajo, juntas directivas…, y también a la hora de defender nuestra gestión, acciones y decisiones. Independientemente de que nuestro papel en la empresa sea en producción, comercial, calidad, logística… debemos conocer las consecuencias que tienen nuestras acciones en el día a día sobre las necesidades financieras de la compañía. Por ejemplo, para el área comercial puede ser muy interesante ampliar el plazo de pago a algunos clientes potenciales para conseguir vender más, pero esto supone para la empresa una necesidad de financiación que, si no está planificada previamente, puede poner en una situación complicada la liquidez de la empresa.
Nuestro rol en la empresa no se debe limitarse
Si además, nuestro papel en la empresa conlleva la relación con clientes y proveedores, no podemos dejar que se limite únicamente a una cuestión de requisitos y precios, sino que requerirá de un análisis más profundo y una verdadera valoración de las inversiones en la que atender, junto con el presupuesto, la rentabilidad y el retorno a corto, medio y largo plazo (su viabilidad económica) para las tres partes, de manera que aseguremos una alianza firme y duradera con ellos.
La importancia de la valoración de inversiones
Para José Antonio Pardo, alumno del Programa de Herramientas Financieras, los conceptos más destacables de los contenidos trabajados son: el uso de un balance operativo frente a un balance financiero, la valoración de las inversiones y el análisis de sensibilidad. De estos conceptos nos destaca “para mí es especialmente interesante la valoración de inversiones, puesto que en mi empresa nos planteamos actualmente varios proyectos de cambio de instalaciones que requerirán inversión y las decisiones van a tener muy en cuenta los criterios de ahorro en los costes y las posibilidades de retorno”. En cuanto al impacto del programa sobre su día a día en el trabajo, José Antonio comenta que “me ha permitido ampliar mi visión del trabajo, añadiendo al punto de vista operativo también el financiero” y sobre la dificultad del programa añade “pese a no tener unos conocimientos financieros de base, he podido seguir y entender cada concepto. Además, otros alumnos con más conocimientos de base han aprovechado herramientas específicas que van a poner en práctica en la gestión económica de su empresa”
Equilibrar recursos con financiación externa
Al finalizar el Programa, Teresa Coret comenta que “al iniciar la primera sesión no estaba segura de seguir y asimilar correctamente los contenidos, pero ha sido muy claro y práctico”. Sobre lo que piensa aplicar de lo aprendido en el programa nos dice “tengo en mente una idea de negocio y me vendrá muy bien para desarrollarla también en su vertiente financiera y de viabilidad, teniendo en cuenta equilibrar recursos propios con financiación externa y disponer de un balance operativo que me permita mantener bajo control la deuda a corto plazo en todo momento”.
El programa de Herramientas Financieras para la Toma de Decisiones, del que ya se han realizado 2 ediciones, forma parte de los programas formativos de la Asociación y se realizarán más ediciones durante el primer semestre de 2014.