Esta semana hemos tenido la oportunidad de conocer en el Foro de Productividad de la mano de Sergio Mut, Director de Operaciones en Grupo Virosque, las claves de la gestión en un sector altamente competitivo y con un mercado muy maduro como es el del transporte, sector que en España supone cada año entre el 4,5 y el 5% del PIB. Forman parte del mismo más de 200.000 empresas, un 6,4% del total, que suman un volumen de negocio cercano a los 100.000 millones de euros y que emplean a más de 700.000 personas (fuente INE). Además forma parte de la cadena logística y de suministro de la mayoría de empresas productivas.
Se trata de un sector transversal, en el que la coordinación con los clientes y la optimización de recursos es fundamental para ser competitivos y en el que la Dirección de Operaciones es clave.
Desde el principio de su exposición Sergio dejó claro que es un sector apasionante, en el que te tiene que gustar el dinamismo y tener una amplia dedicación al trabajo, pues los riesgos en las operaciones son numerosos y mantener un control sobre los mismos sin afectar a la competitividad (precio) del servicio y manteniendo un margen requiere de una muy buena gestión y sumarle revisiones y adaptaciones constantes para minimizar los impactos negativos y cuando dichos riesgos se materializan tienes que estar ahí para afrontarlos.
Por enumerar algunos de estos condicionantes, que son acumulativos y en determinados servicios se van a dar sí o sí en algún:
- Variaciones en el precio del petróleo. Las variaciones al alza se transmiten de manera inmediata al precio del combustible, pero las variaciones a la baja tardan en notarse. En cambio los clientes no admiten subidas por este concepto pero si reclaman bajadas en el precio cuando el petróleo va a la baja.
- Variaciones en la normativa. Las normativas en el transporte son muy estrictas y están sujetas a variaciones frecuentes. Ahora, por ejemplo, la mejora en la fabricación de cabinas y plataformas supone un descenso en el peso de las mismas que permite incrementar la capacidad de carga y la normativa va a contemplarlo. Esto permitirá transportar más encada trayecto, pero también va a incrementar el desgaste y mantenimiento de la flota, requiriendo una buena previsión.
- Sanciones/multas. Están a la orden del día y suponen un incremento en el coste del servicio que hay que tener en cuenta y tratar de aplanarlo. Por poner un ejemplo, sin entrar a analizar las causas, nos encontramos con la siguiente estadística por años:
- Te puedes encontrar con un incremento del riesgo de hasta el 50% en dos años, lo que supone una adaptación importante en la empresa para reducir costes sin afectar al precio y la calidad de servicio.
- Accidentes, climatología adversa, variaciones en la cadena de producción del cliente…
Hay diferentes formas de afrontar estos condicionantes, contar con los mejores recursos humanos es una de ellas. En el consumo de combustible influye también el conductor, invertir en su formación y reconocer en su nómina la reducción de los consumos, es rentable para la empresa, contar con jefes de tráfico altamente competentes, es fundamental. Así como seleccionar muy bien los transportistas colaboradores, que van a ser la imagen de la empresa.
Es importante diversificar en la medida de tus posibilidades, estudiar nuevas oportunidades y analizar muy bien las inversiones, además de maximizar la rentabilidad de tus instalaciones e infraestructuras. Por ejemplo, disponer de un taller propio para el mantenimiento de su flota ha permitido a Virosque abrirlo al público para incrementar sus ingresos y aprovechar el exceso de capacidad. Lo mismo ocurre con su estación de servicio, que además de suministrar a sus camiones les permite ofrecer un precio inmejorable al público obteniendo un margen extra.
También hay que tener muy claro que hay determinados clientes y negocios en los que no interesa entrar. Por diversos motivos, puede que no seas competitivo en esa ruta o que tu flota no sea la más apropiada para el transporte que solicita el cliente, o que ya hay otros en ese servicio que lo están haciendo a la perfección y sobre los que no vas a poder aportar valor. Una cosa es asumir que en determinados servicios o trayectos para un cliente vas a tener pérdidas, pero con la seguridad que el global del negocio con él va a ser rentable al final del ejercicio. Si tenemos que hacer una inversión, la estudiamos al detalle y valoramos muy bien los retornos. Además de un profundo conocimiento de la actividad y el sector, el director de operaciones tiene que desarrollar la perspectiva financiera para plantear crecimientos del negocio que sean sostenibles y viables. Mantener la empresa saneada e invertir cuando hay suficientes garantías de que el retorno va a depender de la buena gestión comercial y de operaciones.
En breve estará disponible en la Know Box la presentación utilizada por Sergio Mut.