En el mundo competitivo en el que vivimos es casi una obligación ser cada vez más productivos, es decir, hacer y conseguir más cosas en cada vez menos tiempo, ya sea en nuestro trabajo o en nuestra vida privada.
Sin embargo, el trabajo duro no siempre garantiza productividad si no se realiza de manera inteligente. Es por este motivo que a continuación te damos sencillos consejos que te ayudarán producir más y más eficientemente.
Marcarse objetivos personales
Los objetivos nos ayuda a ordenar nuestra vida, a saber cuál es el camino a seguir, a tener una guía, a saber cuáles son nuestras prioridades, a programar nuestro inconsciente para poder alcanzarlos, y a mantenernos motivados.
Hacer una lista de tareas o actividades por hacer
Otra forma de ser más productivos es contar con una lista en orden de prioridad con las tareas o actividades o que vamos a realizar en los próximos días, que nos ayudarán en el cumplimiento de nuestros objetivos además de asegurarnos de que no olvidamos ninguna de ellas.
Evitar hacer cosas que nos “quiten tiempo”
Otra forma es evitar hacer cosas que no nos ayuden en el cumplimiento de nuestros objetivos o que nos alejen de éstos o, en todo caso, no dedicarles demasiado tiempo. Podríamos optar por dejar de leer o pasar menos tiempo leyendo una revista o navegar por internet que poco o nada nos ayuda con la consecución de nuestros objetivos.
Buscar siempre la forma de hacer más rápido las cosas
Por ejemplo, utilizar un programa que nos ayude a realizar más rápido nuestros trabajos, buscar una ruta que nos permita llegar más rápido al lugar que queremos ir, tomar un curso de lectura veloz, etc.
Procurar hacer en menos tiempo las cosas que solemos hacer
Siempre debemos procurar romper nuestra marca personal y procurar hacer cada vez más rápido las cosas que solemos hacer; por ejemplo, si para realizar un trabajo o tarea siempre nos demoramos una hora y media, para la próxima vez podríamos tratar de terminarlo en una. Cada vez con el hábito conseguiremos ir reduciendo el tiempo empleado en cada una de ellas.
Ponerse límites de tiempo para realizar algo
Por ejemplo, si tenemos un trabajo o tarea que realizar, podríamos ponernos a nosotros mismos un plazo determinado para terminarla.
Aprovechar el momento de motivación
Si en algún momento nos sentimos motivados, con energía o simplemente con ganas de trabajar, debemos aprovechar para avanzar con nuestros trabajos o para realizar aquellos que nos reportan un mayor esfuerzo, en vez de hacer aquellos que sean sencillos.
Aprovechar la mañana
Si en las mañanas solemos sentirnos con energía y despejados, en vez de desperdiciarla leyendo emails o viendo las noticias, debemos aprovechar el momento para avanzar con los trabajos que nos reporten un mayor esfuerzo, y dejar los emails y las noticias para más tarde.
Mantener ordenada nuestras cosas
Mantener un orden, en nuestras cosas, ya sean herramientas, documentos, papeles, apuntes, es esencial. Esto nos ayudará a tenerlas listas para cuando más adelante las necesitemos, y así no perdamos tiempo en buscarlas.
Aprender a decir “no”
Para ser más productivos es necesario aprender a decir “no”. Cuando alguien nos diga para tener una reunión, para salir a almorzar, para ir a una fiesta, o para hacer cualquier otra cosa que podría quitarnos tiempo o agotarnos.