El cubo de la buena gestión

Como cada primer martes de mes se celebró el Club de Desarrollo y Liderazgo en la Sede de la Asociación de Antiguos Alumnos de la UPV. Profesionales de diferentes sectores se dieron cita para compartir el conocimiento de Jorge Díaz, quien nos presentó su modelo para la Excelencia Operacional denominado “El cubo de la buena gestión”.

“El cubo de la buena gestión” es un modelo de aplicación práctica y sencilla, diseñado con el objetivo de integrar las metodologías más relevantes en un único modelo que sirva a las empresas para  trabajar la Excelencia Operacional. Precisamente la mejor forma de operar una organización es uno de los pilares fundamentales para el éxito de esta, junto con la estrategia de mercado y el diseño de producto /servicio. Sin embargo, la mayoría de las organizaciones suelen poner el centro de su atención en su estrategia o diseño de producto olvidando que la mayoría de las empresas fracasan debido a su operativa.

El taller ha constado de dos partes, una más teórica en la que Jorge Díaz ha explicado cada una de las caras y elementos del cubo y otra en la que se ha puesto en práctica lo aprendido. En esta última los participantes pudieron comprobar como este método puede prestarles ayuda para liderar el cambio en sus organizaciones, potenciando la excelencia en su gestión.

El cubo de la buena gestión es un cubo Rubik  2×2 , donde todos los elementos de cada una de las caras están relacionados entre sí, consta de 6 caras:

1. Propósito: la cara relativa al porqué y para qué y está formada a su vez por cuatro elementos: Misión y visión, Valores, Cliente y Estrategia.
2. Estructura: Se trata de la cara que da el valor definido en la cara del propósito, para ello es necesario materializar los principios en una estructura clara de trabajo. Esta estructura está formada por los procesos, roles, gobierno y equipos.
3. Códigos: nos ayudará a definir las normas de trabajo para que los procesos fluyan, los equipos trabajen y las personas se sientan valoradas y protegidas. Aquí analizaremos las reglas, los flujos de trabajo, estándares y buenas prácticas.
4. Personas: Las organizaciones no son nada sin las personas, son imprescindible para el desarrollo de su actividad por lo tanto en esta cara nos encontraremos con las labores necesarias que el gestor debe desarrollar en cuanto al cuidado de las personas se refiere: Selección de personal, compensaciones justas, desarrollo de las personas y la actividad de energizar a las personas utilizando mecanismos tales como comunicación, empoderamiento y motivación.
5. Rituales: Se refiere a los comportamientos organizacionales periódicos que sirven para facilitar y poner en práctica muchos de los elementos de las otras caras del cubo. Estos rituales son: las piñas de equipo (reuniones
   periódicas rápidas), las retrospectivas (reuniones de reflexión conjunta) y reuniones uno a uno y paseos Gemba (paseos por el lugar del trabajo).
6. Herramientas: En esta cara del cubo se representan elementos indispensables a la hora de desarrollar de manera competitiva un trabajo de calidad: dinero, gestión del equipamiento y materiales, radiadores de formación y tecnología. 

Una vez conocida la parte más teórica, Jorge Díaz pasó a explicar la implementación de modelo de una forma más práctica, donde los participantes analizaron  sus propias organizaciones a través de los 24 elementos que componen el cubo revisando facilitadores y métricas y gestionando el cubo a través de las tres fases de su ciclo de vida:

Una vez conocida la parte más teórica, Jorge Díaz pasó a explicar la implementación de modelo de una forma más práctica, donde los participantes analizaron sus propias organizaciones a través de los 24 elementos que componen el cubo revisando facilitadores y métricas y gestionando el cubo a través de las tres fases de su ciclo de vida:

1. Desplegar y ejecutar.
2. Monitorizar y analizar
3. Mejorar e innovar.

Si quieres conocer más sobre el modelo puedes acceder a la Know Box donde encontrarás la presentación, el plan de acción y la hoja de evaluación.