Juan Vizcaya es ingeniero informático por la UPV. Una beca de la Agencia Espacial Europea (ESA) le permitió emprender su aventura alemana hace 8 años. Hoy en día, forma parte del equipo de operaciones que desde la ESA da soporte a las misiones de otras agencias como la NASA, la agencia espacial rusa, la china, la japonesa y de otras agencias europeas. En esta entrevista nos cuenta cómo ve la cultura social y empresarial alemana y nos da consejos para buscar trabajo en este país.
Cuéntanos como fueron tus inicios profesionales…
Cuando acabé la carrera de informática empecé a trabajar aquí en Valencia, en una empresa que ya no existe: Dimensión Informática. Estuve casi tres años. Luego estuve en otra empresa aquí en el centro, unos meses, hasta que me surgió la oportunidad de irme a Alemania.
¿Habías tenido antes alguna otra experiencia internacional?
Desde siempre he querido salir fuera, experimentar otras culturas y conocer otros países, pero mientras estudiaba no tuve los medios para hacerlo. Antes solo había estado un verano en Inglaterra gracias a una beca del IVAJ cuando tenía 17 años.
¿Y cómo surge la oportunidad de trabajar en Alemania?
Fue a través de una beca también, me fui con una estancia en prácticas que ofertaba la Agencia Espacial Europea de un año de duración.
¿Y actualmente cuál es tu labor allí?
Trabajo en la división de operaciones de la ESA, que es la que se encarga de dar soporte a las misiones externas de terceras agencias: la NASA, la agencia espacial rusa, la china, la japonesa y de otras agencias europeas. Hace ocho años cuando empecé, lo hice en el área de infraestructuras diseñando y desarrollando software. Luego pasé a la división de sistemas donde fui responsable del sistema de telemetría y telecomando, es decir, del sistema que se utiliza para mandar comandos a los satélites y recibir sus datos. Este trabajo me permitió comprender cómo se desarrollan las misiones, las operaciones que son necesarias, los sistemas que implican y cómo estos se manejan. Esto me abrió las puertas para trabajar en el área de operaciones y es muy gratificante porque estoy usando sistemas que he contribuido a desarrollar. Puede decirse que he pasado de ser proveedor a ser cliente de esos sistemas. La verdad es que es un trabajo muy gratificante. Cada día es diferente, me enfrento a retos continuos. Me divierto con lo que hago.
¿Qué principales diferencias has encontrado a la hora de trabajar en España y Alemania?
No sé si la Agencia Espacial Europea puede considerarse como un prototipo de la empresa alemana, pero por ejemplo, en general, aquí el hecho de que pases más horas de las establecidas en tu puesto de trabajo no está bien visto como en España. Aquí lo interpretan como que o tienes más trabajo del que puedes hacer con lo cual tu jefe ha fallado en la planificación o como que no estás capacitado para hacer tu trabajo y por eso te cuesta más. Entonces necesitarás más formación o que te asignen un trabajo más adecuado a tus capacidades. Por norma general, en Alemania si pides hacer una formación que esté justificada para tu puesto rara vez te van a decir que no. Tener un personal bien formado para ellos es una inversión.
¿Y a nivel social y cultural?
Creo que los alemanes, en general, tienen más educación y conciencia social. En España vamos más por libre. No nos organizamos para protestar ni luchar por lo que no creemos justo. Sería un poco aquello de “mientras a mí no me afecte, no me importa lo que le pase al vecino”. Sin embargo, en Alemania se aplicaría más el dicho de “si ves las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar”. Aquí hay más huelgas, más protestas, están socialmente más involucrados. Por ejemplo, el que se especulaba que iba a ser el sucesor de Merkel renunció a su cargo como ministro de defensa debido al revuelo social que se causó cuando se descubrió que había copiado en su doctorado.
Otro ejemplo sería el tema de los impuestos. En Alemania se pagan muchos, pero la gente lo comprende y lo quiere. Si en España descubres que tu vecino evade impuestos lo que quieres es que te diga cómo lo ha hecho para hacerlo tú también. En Alemania, que tus vecinos sepan que evades impuestos, sería una gran vergüenza para ti. Y, muy probablemente los vecinos, te denunciarían. La alemana es una sociedad en la que si alguien comete un delito lo paga. Te puede llegar una multa por ir a 36 km/h en una zona limitada a 30 y la gente lo comprende y lo paga. Eso sí, las multas son proporcionadas, no son exageradas.
Creo que esta mezcla de conciencia social, mayor educación cívica y que sí uno hace algo mal, le “castigan” hace de la sociedad alemana una sociedad muy civilizada.
Aunque, ninguna sociedad es perfecta, y el gobierno alemán también oculta y tapa sus problemas. Aunque no lo parezca, en Alemania también se está viviendo la crisis. Cada vez es más difícil encontrar trabajo. Yo tengo una vecina, que era administradora de centrales nucleares, y que ahora se ha tenido que ir a la otra punta de Alemania a trabajar como secretaria. Empieza a haber ciertos problemas de paro. Aunque hay sectores que siguen demandando profesionales, por ejemplo, las grandes empresas continúan necesitando ingenieros.
¿Qué consejos darías a quienes quieran buscar trabajo en Alemania?
En principio, yo les recomendaría que no vengan a Alemania a la aventura. Si pueden, que busquen desde España. Pueden enviar sus curriculums y hacer entrevistas por teléfono o incluso Skype. Luego si existe interés por parte de la empresa siempre se puede tomar un vuelo rápidamente para hacer una entrevista personal. Hay que tener en cuenta que encontrar un alquiler en Alemania no es tan sencillo como en España. Aquí no hay muchos pisos vacíos. Y si te estableces en un sitio para buscar trabajo y luego cuando lo encuentras te conviene más vivir en otro sitio es complicado.
Si deciden venir y buscar desde aquí, que estudien que zona de Alemania les conviene más, donde hay más empresas de su sector, más oportunidades laborales… que se pongan en contacto con el consulado o si existe alguna asociación en la zona que pueda ayudarles con la traducción de papeles o con la búsqueda de alojamiento.
¿Te gustaría regresar a España?
Algún día me gustaría volver, pero tengo 32 años y aún soy bastante joven. Volvería a España si encontrase un trabajo que me motive. Considero que hacer algo que te gusta es más importante que el cobrar más o menos. Actualmente me divierto en mi trabajo y es algo, que esté donde esté, no me gustaría perder.
¿Qué es lo más difícil de estar fuera?
Sin duda, estar lejos de la familia. Es cierto que en tres horas puedo estar aquí y estoy convencido de que si viviese en Madrid vería menos a mi familia que ahora. Pero no es lo mismo, se establece como una barrera. La sensación es de que estás lejos y los tuyos se preocupan más.
¿Qué mensaje te gustaría trasladar a los jóvenes que están ahora estudiando o empezando su carrera profesional?
Que hay que cuestionarlo todo. Nunca hay que aceptar nada porque sí. Cuando un profesor o un político nos dice algo debemos de plantearnos el por qué. Es importante pensar por uno mismo. Y luego les diría que confíen en la educación. Estar más formado es sinónimo de tener más oportunidades. Y si estás no están en España, que salgan a buscarlas fuera. Todo el mundo tiene derecho a tener una oportunidad.