La primera tienda de llaollao abrió sus puertas en Denia en 2009. Actualmente la firma dispone de 175 tiendas en 23 países. Detrás del éxito de esta franquicia de yogurt helado se encuentra su fundador, Pedro Espinosa. Junto a él repasamos la estrategia de la empresa en distintas áreas clave como la innovación, el modelo de negocio, el marketing, la internacionalización o la gestión del crecimiento.
En Pedro Espinosa se conjugan ingeniería y tradición heladera ¿es esa la clave del éxito de llaollao? ¿Y la importancia que conceden al marketing en la empresa de dónde le viene?
Desde que tengo uso de razón he visto como mis padres y mis abuelos han trabajado para sacar adelante sus negocios y siempre he tenido claro que quería montar un negocio propio. En mi caso me decanté por un nuevo concepto de restauración como es el Frozen Yogurt.
En un mercado competitivo, no solamente lo que vendas debe ser diferenciador, sino también el cómo lo vendamos y la relación que la marca tenga con el cliente. Desde mi punto de vista, el marketing es una de las herramientas más importantes en una empresa, y en este caso, el punto de venta es el eje central de la estrategia de llaollao.
Es importante en el siglo XXI tener una visión distinta y multidisciplinar de los negocios combinada con los elementos básicos “de siempre”.
¿Por qué escogió Denia como primera parada para abrir su negocio?
La elección de Denia como destino para abrir la primera tienda de llaollao fue fortuita. En un principio iba a ser Benidorm, pero el destino quiso que fuera esa localidad valenciana. Lo cierto es que en aquella zona costera encontré un local que cumplía con todas mis expectativas. No hubiera sido lo mismo si hubiéramos empezado por Benidorm. En Denia, el negocio tuvo una proyección de cara a Valencia.
¿Por qué escogieron el modelo de franquicias? Si tuvieran que ponerle algún pero o elemento de mejora al sistema, ¿cuál sería?
En un primer momento la compañía nació como un negocio familiar pero fue mucha gente la que se interesó por la marca y por abrir un negocio de las mismas características. La buena acogida y el éxito alcanzado desde el primer instante, nos hizo plantearnos comenzar a franquiciar el modelo de negocio y, bajo esa fórmula de franquicia, ha sido como hemos logrado crecer y expandirnos nacional e internacionalmente.
Es importante en el siglo XXI tener una visión distinta y multidisciplinar de los negocios combinada con los elementos básicos “de siempre”
Llaollao ha sido reconocida la franquicia europea nº 1 por implantación en el mundo, mientras que muchas empresas españolas, sobre todo las PYMEs, no saben cómo traspasar las fronteras. ¿Qué es lo que ha hecho llaollao de forma diferente?
La adaptabilidad del modelo de negocio, la universalidad del producto y un mercado joven, con mucha trayectoria, tanto en Europa como en la mayor parte del mundo, han sido las principales razones que han llevado a llaollao a apostar por la internacionalización.
llaollao mantiene una línea de negocio que se adapta fácilmente a cualquier cultura, religión o país. Esto favorece la expansión de aquellos países de costumbres diferentes a las occidentales. Por ello, la facilidad de introducir este modelo de negocio en cualquier punto del mundo. Las zonas me mayor interés actualmente para la compañía son Latinoamérica, el sudeste asiático y países del arco mediterráneo.
¿Hay algún mercado en el que no os hayáis atrevido a entrar? ¿Tienen alianzas con otras empresas españolas?
Llaollao está abierto a todos los mercados. Hemos establecido nuestra propia estrategia de expansión y vamos en esa dirección; no estamos en sociedades con otras empresas en el extranjero.
Las tecnologías son un medio y no un fin y así se ha demostrado en el uso de las redes sociales por parte de llaollao, ¿cuál es la estrategia online en estos momentos?
Las redes sociales son esenciales para interactuar con el cliente, e incluso nos sirven como herramienta de control de nuestra propia empresa: los clientes cuentan en las redes sociales lo que ocurre en los locales, lo que les ha parecido bien o mal, por qué volverían o no al local, cuelgan fotografías. Pero lo fundamental es hacer partícipe al cliente, que el cliente vea que es parte de la empresa, que sus decisiones y opiniones cuentan.
Hace unos meses pusimos en marcha en Facebook un concurso para elegir un nuevo topping para llaollao. El topping elegido se vende en todas las tiendas. Así es como logramos que los clientes puedan participar. Hoy en día es fundamental crear amor por la marca, porque hay muchísima competencia y las redes sociales te ayudan a conseguir esos seguidores fieles a la marca.
En cuanto a Twitter, sobre todo seguimos a aquellas personas que de alguna manera hacen mención a llaollao y les transmitimos que existe un perfil de la empresa en Twitter para que nos sigan ellos a nosotros. También intentamos re-direccionar a estos seguidores a Facebook, que es donde centramos las acciones de marketing online. Lo que sí es cierto es que el fan de Twitter es mucho más fiel que el de Facebook, hay una mayor fidelización en esta red social. Si alguien te sigue en Twitter es porque realmente le importa la marca.
En un mercado competitivo, no solamente lo que vendas debe ser diferenciador, sino que también el cómo lo vendamos y la relación que la marca tenga con el cliente
¿Qué planes de expansión tenéis a corto y medio plazo?
La primera tienda de llaollao abrió en Denia en 2009. Actualmente disponemos de 175 tiendas en 23 países. En nuestros planes de expansión a medio plazo, ya que hacemos un estudio previo de los perfiles y territorios que toman su tiempo, se encuentran Latinoamérica, el sudeste asiático y países del arco mediterráneo. La empresa, que inicialmente contaba con 3 personas, ahora involucra a más de 600 a nivel internacional.
Con un crecimiento tan rápido, ¿existe un procedimiento de selección del franquiciado más allá del económico que incluya temas culturales o actitudinales?
Sí, nosotros buscamos perfiles de franquiciados que se adapten a nuestro modelo y filosofía de negocio; por lo que hacemos un estudio y analizamos la viabilidad.