El éxito de cualquier empresa está muy relacionado con sus recursos humanos. Son las personas las que desarrollan el trabajo y las que logran los objetivos. Por lo que dotarlas de metodologías ágiles de trabajo es una opción al alcance de cualquier organización para conseguir que objetivos, productividad y motivación se conviertan en una realidad.
La metodología Agile ha impulsado numerosas mejoras en empresas alrededor del mundo. Lo que inició como un método enfocado al sector de desarrollo de software a inicios del siglo XXI ha pasado a ser un recurso en cualquier área de la empresa y, por supuesto, el área de Recursos Humanos no es una excepción.
La metodología Agile es un modelo de mejora continua, que implementa plazos de entrega rápidos y busca que los empleados se centren en una tarea específica para evitar perder tiempo en otras. Con esta estrategia es posible dividir las tareas, fijar entregas en el corto plazo y avanzar a un ritmo más ágil.
Para los Recursos Humanos, Agile implica:
- Dar protagonismo a las personas, a la colaboración y a las interacciones entre empleados frente a los procesos organizativos.
- Una mejora continua. Se asumen los errores como algo natural y de lo que se puede aprender para aportar valor a la empresa.
- Colaborar con el cliente de manera estrecha.
- Ser ágil a la hora de adaptarse a los cambios.
Las empresas que apuestan por ser ágiles desde el punto de vista de sus Recursos Humanos se caracterizan por contar con un entorno colaborativo y humanista. Las decisiones se adoptan de manera conjunta por parte de profesionales no solo muy capacitados, sino también motivados y con aptitudes para el trabajo en equipo, lo que facilita las sinergias y la gestión de conflictos logrando así una mayor fluidez en todos los procesos. Las personas se convierten en los actores principales generadores de valor para la empresa.
Como cualquier metodología de trabajo nueva, debe ser comprendida y aceptada por todas las partes interesadas. El trabajo en equipo y la fijación de objetivos comunes son elementos clave para que la metodología agile funcione satisfactoriamente.
Scrum: propósito y funcionalidad
Ken Schwaber y Jeff Sutherland, los creadores de Scrum, innovaron en las metodologías de trabajo con este recurso ágil que cuenta con el trabajo colaborativo. Con él, se mejora la motivación y la producción de los trabajadores y a su vez, el de la empresa.
Consiste, básicamente, en planificar cada proyecto en intervalos cortos de tiempo. Es decir, cada poco tiempo se hacen entregas pequeñas y se va revisando la ejecución del trabajo. Es una buena opción para proyectos grandes que son susceptibles de requerir cambios cada poco tiempo.
El trabajo, además, se divide por grupos y cada uno debe autogestionarse. En este método de trabajo el departamento de Recursos Humanos puede asumir un papel fundamental, guiar y estar presente durante este proceso.
El rol que cumple Recursos Humanos en esta estrategia ágil brinda apoyo en tareas tales como:
- Identificar las fortalezas y debilidades de las personas que forman parte de la organización para identificar los distintos roles que integran un equipo de Scrum.
- Crear una estrategia para potenciar el crecimiento individual y grupal.
- Apoyar a los miembros del equipo a conseguir sus objetivos marcados.
- Potenciar canales de comunicación efectivos entre los miembros del equipo
- Dar reconocimiento de desempeño al equipo
¿Cuáles son los roles imprescindibles en Scrum?
Para que Recursos Humanos pueda impulsar su estrategia y adaptarse a esta metodología de trabajo, es fundamental que al inicio se identifique y se entienda el rol de cada empleado dentro del equipo.
Un equipo de Scrum se compone:
- Scrum Master: es un facilitador. Es el líder del equipo y se encarga de organizar las tareas y motivar a todos para cumplir los objetivos planteados. Modera y facilita sus interacciones. Aplica los procesos de Scrum y hace que las reglas de cumplan. Resuelve los problemas que puedan surgir y garantiza que el equipo de Scrum tenga un entorno productivo para trabajar. Un perfil Scrum Master abarca una amplia variedad de habilidades, conocimientos y experiencia, porque deben ser capaces de crear equipos de alto rendimiento e impulsar el cambio ágil dentro de una organización. Sin olvidar que, en los Scrum Máster resulta clave apreciar el valor de la inteligencia emocional, destacando el autoconocimiento de uno mismo y la empatía como la capacidad de comprender o sentir lo que otra persona está experimentando desde su marco de referencia, es decir la capacidad de colocarse en la posición de otra persona. También sería interesante destacar el optimismo como una cualidad clave del Scrum Máster, porque desviar la negatividad nos hace mejores entrenadores; la humildad y un impulso básico de deseo de ayudar a los demás para crear un entorno propicio en el que todos puedan alcanzar el éxito. En el trabajo en equipo el éxito general, el de todo el equipo resulta más enriquecedor que el éxito de uno solo.
- Scrum Owner: Es el representante del cliente dentro del equipo. La responsabilidad principal del Product Owner es representar las necesidades del cliente. Por lo que debe tener una visión sólida de lo que se desea entregar a los stakeholders, imaginar el producto que se quiere construir para el cliente; ser un buen comunicador de esa visión como también destacar por sus habilidades de negociación para evitar retrasos en la toma de decisiones. Es el responsable de que la estrategia de desarrollo de producto esté clara y se puedan alcanzar los objetivos de la manera más eficiente.
- Development Team: Que se llame equipo de desarrollo no quiere decir que lo que esté desarrollando sea software. El equipo de desarrollo se encarga de realizar el trabajo de las tareas y cumplir con los tiempos establecidos en cada El tamaño óptimo del equipo de desarrollo es lo suficientemente pequeño como para permanecer ágil y lo suficientemente grande como para completar una cantidad de trabajo significativa. Es recomendable un pequeño equipo de 3 a 9 personas.
Este equipo debe ser multifuncional y autoorganizado de tal manera que cada integrante escoge sus actividades. La responsabilidad de las tareas se divide en todo el equipo, todos son vistos como un conjunto.
El reto al configurar el equipo es que lo miembros del equipo no solo cuenten con los conocimientos, la experiencia y las habilidades necesarias para trabajar, sino que confíen en ellos y estén muy motivados. Las personas motivadas hacen cosas increíbles. Un equipo no motivado difícilmente desarrollará un gran producto o estará comprometido con proporcionar un gran servicio.
El equipo de desarrollo en Scrum en una pieza fundamental en este marco de trabajo ágil, son los que harán realidad el proyecto.
La filosofía Scrum resalta e impulsa el trabajo en equipo, el aprendizaje constante y una estructura que es flexible a los cambios. Una organización flexible, que sitúa a las personas como foco de la estrategia, que las escucha teniendo en cuenta su opinión es más atractiva para atraer y retener talento.
Esto favorece, en consecuencia, los procesos de reclutamiento y beneficia a la empresa en su estrategia de Employer Branding y en la creación de equipos de trabajo formados por personas capacitadas y motivadas, un valor indispensable dentro de la organización y un engranaje perfecto para fluir hacia el éxito.
